jueves, junio 16, 2011

Resaca

Now Playing:

What would you do if my heart was torn in two?
more than words to show you feel that your love for me is real
- Extreme -

La resaca es ese sentimiento de malestar físico que ocurre usualmente después de consumir mucho alcohol. Según las investigaciones (que no son muchas) se produce principalmente porque tomar mucho deshidrata e inhibe ciertas enzimas del Ciclo de los Ácidos Tricarboxílicos (usualmente abeviado como TCA) lo cual altera el metabolismo y produce ciertos químicos que normalmente no producimos.

En fin, no vine a hablarles sobre la cruda, porque o bien ya la conocen o la pueden experimentar por ustedes mismos (lo cual ciertamente suele ser más divertido que leer un blog) pero sí quiero discutir una tangente de la misma.

Piensa en un gran bebedor, de los que se ponen hasta las chanclas cada fin de semana (sé que hay peores, pero usemos a éstos como ejemplo). Llega la noche del viernes, consiguen a uno o varios amigos, van a un antro/club/bar a tomar todo lo que puedan a la vez que bailan (?) y coquetean con esa sociedad. Todo diversión.

A la mañana siguiente, llega la resaca. ¿Por qué? Es decir, si no fuera por la resaca, posiblemente el bebdor no tendría nada que lamentar en el corto plazo (dígase, a la mañana siguiente). Sin embargo llega la resaca y con ella muchas veces los juramentos de no volver a beber tanto.

Piensa un poco en ello: es un arrepentimiento un poco forzado ¿no? Normalmente uno se arrepiente de lo que ha hecho por las consecuencias (¿imprevistas?) y posiblemente irremediables. Sin embargo, en el caso de la resaca, es un malestar bastante reversible, poco dañino per se pero muy muy molesto que, por otra parte, es bastante predecible: casi cualquier persona en edad sabe que tendrá resaca si toma mucho, puro empirismo.

¿Qué produce? Promesas de no volver a tomar (hasta el siguiente fin de semana) y un mal día en general. Después, la vida sigue tan tranquila. De nada sirvió el dolor (predecible) porque produjo promesas vacías.

Creo que vivimos mucho con resacas, alcohólicas y de muchos otros tipos. En algún momento de nuestras vidas sabemos bien sobre los errores que vendrán y aún así nos dirigimos a ellos. Disfrutamos, nos duele reversiblemente, prometemos no volverlo a hacer y lo volvemos a hacer. Enguajue y repita.

Arrepentimientos que, por otra parte, también son forzados. Nososotros mismos nos inflingimos ese dolor, pero no es perdurable, no deja cicatrices, es light. Cualquier dificultad la catalogamos como "un gran problema que nos ha enseñado sobre la vida" pero en realidad no nos ha alimentado.

No le deseo el mal a nadie, pero sé que sin cicatrices no aprendemos, no vivimos. En ese sentido, es preferible pasar por una cirrosis que por una cruda mental. Es peor, pero aprenderemos en verdad.

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