Amor de autobús
Ya estaba decidido
a no dejar mi asiento
mas como súbito viento
sus ojos negros me dejaron aturdido
cuando mi asiento hube dejado
recordé que estaba sediento
y de sus ojos yo presiento
que mi sed pronto habrá vencido
Tiene flores que elogian su belleza
que no consiste en más que la simpleza
que la juventud le acaba de regalar
Y del camión se va a bajar
Mis amores de autobús deben pronto declinar
Pues fuerte y efímera es su naturaleza...
Gracias a la chica en la ruta 4, a eso de las 5 de la tarde que ayer me cedió la gentileza de aceptar mi asiento...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario